La Martina en el Coto, ¿viste?

Bueno, no exactamente en el Coto, pero en el Lidl, que viene a ser lo mismo aquí. El Sr. Coto aún no se decide en invertir en Bélgica.
Me explico.
La primera vez que me pasó, fue con un chico con un buzo de La Martina Polo Ranch. Estaba visitando una fábrica de cerveza en Flandes que es algo parecido a visitar una bodega en Mendoza. Te cuentan la historia de la birra, la mezcla, el proceso y después te dejan catar todos los diferentes tipos de productos que elaboran: Cerveza ligera, cerveza con mayor graduación alcohólica, de cerezas, negra, 8º, 12º, 13º, etc. Claro que a veces la mezcla se te sube a la cabeza rápidamente y hace estragos, pero no tan graves como para que mi alucinación lupulosa me hiciera ver fenómenos para-fashion en el Flandes profundo.
La segunda vez fue más cerca del verano, en otra cervecería, una tarde de sol. Estaba cerca de Gante, pero por alguna poderosa razón no recuerdo dónde con exactitud... Un polo de La Martina y un buzo de Los Pumas pasaron a mi lado, cerveza en mano, hablando flamenco (neerlandés) perfecto. Que orgullo me hizo sentir pensar que los flamencos se dedicaban a explorar la patria querida, a comprar souvenires chics y a vestirlos en sus salidas de domingo.
La tercera vez, tampoco sé muy bien dónde fue, sólo recuerdo que abordé al chabón que lucía un buzo de LM.
-¿Has estado en Argentina? – pregunté.
Él sonrió con curiosidad.
–¿Argentina? No, nunca estuve-me dijo y puso cara de no saber ni donde quedaba ni porqué le estaba haciendo esta pregunta.
Creo que sospechaba que yo tenía una cámara oculta y era todo una broma para la tele. Le expliqué que el buzo que estaba usando era de un club de polo en Buenos Aires. El chico se rió.
- ¿Polo Club? Neen, 3 euros- me dijo-. La compré en el Lidl, por 3 euros, están en oferta.
Me quedé helado. Pensé que era cierto que los chinos estaban haciendo estragos en el mundo –bueno, la burbuja, mejor dicho- de los fashion argentinos vendiendo los excedentes a los COTOs del mundo entero.
Un verdadero horror, ¿viste?