martes, 27 de febrero de 2007

Semanas agitadas

Hace un tiempo que no escribo, pero estas últimas semanas fueron especialmente agitadas en todos los planos, pero especialmente en el sentimental.
Claro que resulta normal cuando vienen amigos desde tan lejos a los que no ves desde hace años.
Y fue increíble, era como estar en el Túnel del tiempo (comparación válida solo para los de mi generación y algunos freakies de las series de los 60 que ahora se llevan tanto). Y entonces, dando vueltas en esa especie de limbo multicolor con esa musiquita como de hilo musical, aterrizamos los 4 en Bruselas y nos fuimos a Brujas y Gante con F. Mil cosas para contar, pero sería muy largo. Se quedaron un par de días y fue muy fuerte, tantos recuerdos porteños, tantas cosas. Me recordaba algunas pelis, alguna canción. Ok, ok, lo diré: They way we were, Barbra Streisand, también en los sesenta, yo tendría 7 años como mucho y mi prima Celia lo escuchaba, o sería mi tía Zuny. No lo sé muy bien.
En fin, que idos los amigos me llegó un nuevo compañero de departamento, un joven italiano de Milán que resultó malinterpretar todo y declararse homófobo al segundo día. Lo que ocasionó un lío.
El italiano duró solo unas horas después de la declaración de hostilidades y tuve que buscar nuevamente. No fue dificil, pero volver a empezar ya me suena familiar. Es mi karma.

domingo, 18 de febrero de 2007

Experimento de convivencia

Y esto de tener el apartamento todo para mí, ahora que mi compañero rumano se fue, dio lugar al experimento. Habitualmente F y yo nos vemos solamente los fines de semana, de viernes a domingo, dia de volver a casa, planchar camisas y prepararse para enfrentar el lunes que se aproxima. Muy muy muy rara vez nos vemos en algunos de esos dias que están entre el lunes y el viernes. Creo que esa fue la razón por la que se me ocurrió que sería una buena prueba que conviviéramos en Bruselas mientras nadie se mudase al apartamento. Y en eso estamos ahora, viendo si nos soportamos cuando no estamos de fin de semana: es decir, cuando estamos estresados, cansados, de mal humor y lo que queda de nosotros y de nuestras neuronas llega a casa con ganas de tomar una rica zoopita y poner la mente en blanco frente a la tele o al ordenador.
Llevamos ya algunos días en este trance (exactamente 6) y parece que F está entusiasmado.

Estamos explorando áreas en Bruselas o alrededores donde podríamos mudarnos juntos, cerca del metro y cerca del ring.
Yo tengo algunas (muchas) de mis cosas para limar y otras tantas por resolver en varios planos personales, como por ejemplo no sé como manejar los comentarios "constructivos" que me hace con respecto al badminton... y me enojan mucho.
Y así varias otras cosas. : )
Por lo visto lo seguiremos intentando con ahinco.

Hoy domingo, nos toca Lokeren (el ayto en la foto en un inusual día sol).

viernes, 16 de febrero de 2007

Badminton: ¿mejor me dedico a las bochas?

Seguí insistiendo en jugar badminton. Últimamente lo hacíamos en 2 lugares. A veces en Lokeren, a veces en Bruselas. Las últimas veces nos apuntamos en BGS, una asociación que promueve el deporte en Bruselas y fuimos a jugar 2 veces allí, los viernes.
La primera vez que jugamos me enojé demasiado con un tío que remataba el volante o pluma (ver foto) contras nuestras caras... me daban ganas de partirle la raqueta en la nariz... pero F me dijo que debía pedirle civilizadamente que no lo hiciera más (eso es Europa). Lo siguió haciendo así que después de la quinta vez que el volante me pegó en la cara dejé de jugar (una especie de huelga de raqueta caida) hasta que llegaron a los 21 puntos y se acabó el partido. Por suerte.
El viernes pasado fuimos otra vez, y aunque me la pasé muy bien, y nadie me apuntaba a los ojos, los comentarios de F al llegar a casa fueron un poco desmoralizantes. Según F mi compañero del último partido tenía miedo de que le diera con la raqueta cada vez que iba a por la pluma, y que también hago muchas cosas estúpidas que son para reirse...
En fin, creo que dejaré de jugar badminton y me dedicaré a cualquier otra cosa que sea un poco más individual... y que me divierta en la misma medida. Fue divertido mientras duró.
Y no me pregunten por que soy tan dramático con estas cosas porque ni yo mismo lo sé.
: (

jueves, 15 de febrero de 2007

Andrei (RO) se fue

Y casi sin que me diera cuenta se terminó el plazo de Andrei y se fue. No volvió a Rumania, porque su novia Raluca consiguio un stage en la Comisión y él en el Comité de las regiones. Así que se fueron a vivir juntos, no muy lejos a un estudio en la Place Marguerite.
Por un lado es extraño estar sólo otra vez, especialmente cuando vuelvo de la oficina, pero también se disfruta volver a tener el apartamento todo para mí.
Ahora estoy en el proceso de búsqueda de nuevo compañero de piso, así que he recibido varios mensajes pero solo dos personas han venido a ver la habitación: Un francés y un chipriota.
Veremos quien se muda a la calle Bossaerts.

domingo, 11 de febrero de 2007

Patoruzito también clava la pica en Flandes

Si, el título suena medio surrealista, pero así me quedé ayer, como una pintura de Miró cuando intentaba comprar un disco duro externo y una tostadora en Media Markt (una suerte de supermercado eletrónico-mediático) en Bélgica.
En Bruselas hay solo dos Media Markt, uno en el centro - en la rue Neuve - y otro en las afueras - llegando al ring (digamos algo así como en Liniers, un poco antes de llegar a la Gral. Paz).
www.mediamarkt.be
No voy a decir que este Media Markt es una de mis tiendas favoritas, porque no tiene libros... pero casi: muchos electrónicos, software, dvds, cds.
Dando una vuelta para ver que tenían en oferta me encontré con esto. Creo que fue en Bruselas donde aprendí el significado de la palabra
atónito (del lat. attonĭtus): Pasmado, alelado, absorto o espantado de un objeto o suceso raro.
Desde la portada de un DVD en la sección novedades me miraba la caricatura de un indiecito conocido, con Isidorito Cañones por detrás y más atrás un jeep IKA con la Chacha, Upa y otros cuyo nombre no me acuerdo.
Me quedé helado, ni sabía que habían hecho una película y menos que me la iba a encontrar en Flandes. -¿Que hace esto acá?, le dije a mi amigo. El no tenía ni idea de qué le hablaba y tampoco entendía demasiado cuando trataba de explicarle.
La traducción en francés es graciosa: "Suivant la tradition de sa tribu, le petit indien Patoruzito, est prêt pour en devenir chef..." suena mut raro leerlo así, parece que el gancho para este mercado es que se lanza a atravesar la Patagonia. Y la Patagonia tiene mística en el primer mundo!!!!
Obviamente ya es parte de mi colección de DVDs aunque el precio me haya parecido exhorbitante.
Todavía no la vi, puede que esta tarde de domingo, húmeda y con una llovizna tán mínima que jode enormemente, sea casi ideal para mirar una peli, tirado en el sillón, tapado con la manta de lana cruda que compre hace mil años en Chiloé.
Y digo una tarde casi ideal porque es una pena no tener bizcochitos de grasa para el mate y Patoruzito!

jueves, 8 de febrero de 2007

Y todo amaneció blanco y silencioso : )

Es una pasada salirse del sueño, caminar a los tumbos todavía enredado en las sábanas de la noche, atravesar la cocina para preparar el mate y darse cuenta a través de los cristales que toda la ciudad amaneció blanca.

Esta mañana, en alguna de las tantas veces que apagué el despertador pensé que el sonido era diferente a todos los días. Fui a prepararme el mate y vi a través de las ventanas que estaba todo blanco. La nieve amortigua los ruidos y solo se oían algunas risas de los chicos que iban al colegio. Caminé con gustosa dificultad los 10 minutos hasta la oficina.

Aquí una imagen de la Place Ambiorix, con el pobre Ambiorix duro de frío... y abajo un video que hice desde la ventana de casa, mientras tomaba mate y una tostada con mermelada de naranja.

martes, 6 de febrero de 2007

Primera nieve en bruselas

Y llegó la nieve a Bruselas... parece que volvemos a la normalidad climática pero no me engaño. Soy bastante apocalíptico con este tema y creo que vendra una hecatombe y la veremos.
Dejo constancia aquí, en este Blog como Alejandro del Prado... ¿se acuerdan?
Y bien, aquí va un pequeño vídeo que hice ayer, al salir del trabajo.
Esa rotonda es Schuman, la cosa de luces de colores es una instalación artística que se trajo la presidencia alemana de la UE por un par de meses y por la que habrá pagado una fortuna.
El edificio extraño es la sede de la comisión europea.

sábado, 3 de febrero de 2007

París, otra vez en mi mapa

El jueves pasado tuve que ir a una reunión de trabajo en París, en la École de Mines, al lado de los Jardines de Luxemburgo.
Era simple para mí, solo por el día, supuestamente iba en la mañana con el Thalys y regresaba a Bruselas por la tarde una vez terminada la reunión. Digo simple porque hacía ya más de 10 años que no iba a París y eso que me queda a no más de 1 hora y media de tren.
La última vez que visité París fue un viaje de despedida con mi madre. Ella se moría y nunca había estado en Europa. Vinimos a Paris, contra el presagio de los médicos y aunque ella quería conocer Roma. Creo que terminamos en París porque yo insistí y mi vieja me dio el gusto.

Por ese entonces alquilamos dos estudios cerca de la Place Nation durante varias semanas y caminamos de a poco, en la medida que ella podía, descubriendo esta ciudad maravillosa y de paso a nosotros mismos.
Desde entonces nunca me atreví a regresar, se me habían quedado muchos recuerdos enredados en tan pocas letras.
Y entonces tuve que volver. Esta vez por un poco más que una conexión de tren o de avión o que una reunión en un sótano de la École de Mines. Por causas ajenas, me pidieron que me quedara esa noche en Paris y que al día siguiente viajase a Marsella a cubrir otra reunión de trabajo. Finalmente me quedé las dos noches en Paris, saliendo a la calle justo lo necesario.

La última mañana se hizo literalmente la luz. Amaneció con sol, un cielo azul brillante y dedespejado, una temperatura ideal. Tenía pensado salir del hotel hacia la Gare du Nord pero era imposible resistirse al encanto. Dejé la valija en el hotel y me animé a asomarme a la ciudad que resplandecía bajo ese cielo. Lo hice despacio, con mucho cuidado por si dolía.
Y paso a paso se fue dibujando París bajo el sol y los recuerdos eran cálidos.
Bajé del Metro en el Hotel de Ville y anduve hasta Notre Dame donde cumplí mis rituales de siempre con una alegría asombrosa. Después bajé por la rive gauche hasta el Louvre, de camino tome un café y un croissant en una terraza. Crucé las Tullerias hasta la Place de la Concorde.
Cuantos recuerdos y que bonitos.
Hoy siento que esa ciudad, vedada por tanto tiempo, está otra vez en mi mapa.